


El concepto básico del culto hindú, ya hemos dicho, es el de la metempsicosis, transmigración de las almas de unos cuerpos a otros, que justifican su creencia en la migración del alma de un ser humano al cuerpo de un animal, lo que explica el enorme respeto que el hindú siente por los animales y que muchos de ellos sean considerados animales sagrados. De hecho, en
En los Veda se hallan numerosas referencias a ambas medicinas, en el Atharveveda se contienen las fórmulas mágicas de los exorcismos y conjuros, conteniendo 731 plegarias o encantamientos para el tratamiento de las enfermedades de los seres humanos y de los animales. El códice que podemos considerar realmente médico es el Aiurveda (conocimiento de la longevidad o de la vida), para sus recopiladores, la enfermedad emanaba (siguiendo la tradición mesopotámica) de la obra demoníaca de Písacos y Raksasas, cada enfermedad era traída por uno de estos diablos, que podía ser neutralizado, transformando en inofensivo, si se llegaba a conocer su nombre.
Los tratamientos se aplicaban por igual a seres humanos y animales, asociando los conjuros, ensalmos y extractos de plantas, la planta “Kustha” se utilizaba para curar la fiebre, la “Apanarga” para las enfermedades gastrointestinales, la “Arundhati” curaba al toro y era utilizada para devolver la leche a la vaca. La castración se utilizaba en los bóvidos y en los carneros, en el Veda se describen tres métodos para la castración:
El aplastamiento de los testículos entre dos piedras.
El aplastamiento del cordón espermático entre dos estaquillas de madera.
La creación de un hipospadias artificial mediante un cuchillo de piedra.
Según el Veda, son numerosas las plantas que se utilizaban como elementos curativos, para incrementar la producción de leche de los bóvidos y como coagulante de la leche. Hacia el siglo VIII a.n.e., del códice de Manu se desprende que los médicos eran ordenados por castas y que existían escuelas de medicina. Los animales estaban protegidos por ley de una forma tan amplia como las personas, la vaca es la madre del Dios Brama, Indra es el toro posesivo y fiero en las plegarias de Brahama, se citan algunas bestias antes que al ser humano, una de estas preces dirigida a Brama dice: “tú eres el que cura al buey, al caballo, de ti la curación para el hombre, de ti la salud para la cabra y la oveja”.
Cinco son los animales que pueden ser ofrecidos para el sacrificio, en orden decreciente de valor: el buey, el caballo, el hombre, el carnero, y la cabra. Con la llegada de Buda, la protección de los animales se acentúa y el “raja” (veterinario) pasa a ser un personaje muy importante, en los escritos de Sushruta, el más ilustre médico de
El Mahavanma ó crónica Zingalesa, recuerda que el rey Duttha Gamani (
Los hindúes otorgaban una gran importancia a los aspectos externos de los animales, por ejemplo el pelo, la edad del animal se reconocía en la dentadura y en diversos tratados se describen las triquiñuelas que empleaban algunos tratantes de animales para embaucar a los compradores mediante la modificación de la dentadura de las bestias. El médico y el veterinario hindú practicaban la sangría, utilizaban vesicantes, la cauterización, la aplicación de sinapismos y diversos medicamentos, junto a esta medicina racional convivían los encantamientos y el empirismo.
En el Aiurveda los desequilibrios en la relación del individuo con el medio son las causas más importantes de enfermedad, el tratamiento médico tenía un sentido de ser una ayuda de los seres humanos al restablecimiento del orden del cosmos, un orden religioso, moral y físico, que la enfermedad había alterado. Concebía el mundo físico y psíquico como una unidad y una constitución común del macro y microcosmos a base de cinco elementos: el éter o vacío, el viento, el fuego, el agua y la tierra. Hay tres elementos biológicos o esenciales para la vida:
El viento, presentado como soplo o corriente del cuerpo, prama, idéntico al que recorre el universo.
El fuego, presentado bajo la forma de bilis
El agua, bajo la forma de pituita que recorre todo el cuerpo.
En la terapéutica se hallan desarrolladas la dietética, la farmacología y la cirugía, esta última en alto grado, incluso la cirugía plástica, de la que es continuación directa la cirugía plástica europea aparecida en
La cirugía aiurvédica fue la más notable y sus principales técnicas fueron: escisión, incisión, escarificación, puntura, vendaje, extracción, drenaje y suturas, los cirujanos tenían un rico instrumental quirúrgico que demuestra la habilidad y adelanto de las intervenciones de diversos tipos, cirugía plástica, oftalmología, amputaciones, y otras, y desinfectaban los instrumentos quirúrgicos, requieren más de 100 instrumentos quirúrgicos diferentes, y el uso de la sutura de hormigas, para suturar intestino con cabezas de grandes hormigas haciendo morder los bordes de las herida, también usaban cauterizaciones y cirugía de los cálculos renales por vía perineal.
Sushruta es el médico que nos dejó un tratado, el “Sushruta Samhita”, en el que desarrolla y perfecciona la rinoplastia, el labio leporino, las hernias, los cálculos vesicales y la cirugía de los ojos, principalmente cataratas, escribió: “Solamente la unión de la medicina y cirugía conducen al médico completo, el médico que carece del conocimiento de una de esas ramas es como un pájaro que sólo tiene un ala”; pertenecía al grupo de Ashirin, médicos formados por Prajapati “ señor de todas las criaturas” que fue creado por Brama “ el ser que existe por sí mismo”.
La aceptación de los Mandamientos de Charaka, eran un requisito preliminar al estudio y normas de conducta para el futuro médico en el ejercicio de su profesión, el Charaka Anhita un texto (que en algunos párrafos se remonta al tercer milenio a.n.e., si bien no sería el más antiguo de los textos de medicina pues el Nei-Jing chino se remonta al
De acuerdo con las traducciones de Charaka, salud y enfermedad no están predeterminadas, y la vida puede prolongarse por el esfuerzo humano y el cuidado en el estilo de vida. Se atribuye a Charaka la siguiente cita: «Un médico que falla en entrar en el cuerpo de un paciente con la lámpara del conocimiento y el entendimiento, nunca podrá tratar enfermedades. Deberá primero estudiar todos los factores, incluyendo el entorno, que influencian la enfermedad, y luego prescribir tratamiento. Es mas importante prevenir una enfermedad que buscar su cura». Charaka fue el primer estudioso en presentar los conceptos de digestión, metabolismo e inmunidad. De acuerdo con su traducción de los Vedas, el cuerpo funciona porque contiene tres dosha o principios, llamados movimiento (vata), transformación (pitta) y lubricación y estabilidad (kapha). Los doshas son a menudo llamados «humores», producidos cuando la sangre, la carne y los huesos interactúan con el alimento consumido. Para la misma cantidad de alimento ingerido, un cuerpo produce dosha en cantidad distinta a otro cuerpo, por eso un cuerpo es diferente a otro. Además la enfermedad se produce cuando el balance entre los tres dosha se desequilibra. Para restaurar el balance Charaka prescribía drogas medicinales
Realizó las exploraciones anatómicas topográficas en cadáveres humanos sobre todas las estructuras. Fue el primero en descubrir el aparato circulatorio, alrededor del siglo III a. n.e., nominado desde entonces Mahatma Amar. Charaka estableció un método sobre prevención de la salud, funcional hasta la actualidad, por lo que es también considerado a nivel mundial como el padre de